Es curioso cómo nadie en estos tiempos busca ser original. Creen que la receta de la felicidad la tienen los otros, que nacieron así. No ven sus logros, sus sacrificios, su día a día y lo más importante es que no registran la esencia. Eso es lo que tiene cada uno y nos hace diferentes, distintos, únicos. Imposibles de clonar.
Antes no pasaba. Recuerdo que no era la mejor, ni la más linda, ni me sobraba la plata, pero me sobraban las ilusiones, las ideas y los sueños y no creía que no los iba a cumplir, no recuerdo la frustración como camino y menos el resentimiento, al contrario eran el motor para seguir adelante.
Hay una parte muy enferma que tenemos que curar en estos momentos y es la de creer que los otros son felices y uno no lo es, la de mirar al otro y copiarlo y querer sacarle todo lo que tiene, o lo que es. Por empezar quizás esa persona sea dotada o agraciada y en lugar de envidiarla sería bueno recuperar la capacidad de admirarla, respetarla, aprender. Ése es el lugar que le tocó en este mundo. Es más sano, más honesto y menos frustrante que codiciarla o copiarla. Admirar no es copiar. Admirar es entender el lugar que cada uno ocupa. El admirado está ahí porque es su lugar en el mundo, es el personaje que le tocó, tiene esa responsabilidad, es su misión, tiene el compromiso de marcar un camino.
Ese camino no es egoísta, es generoso. Copiar es egoísta y hace que no seamos conscientes, caemos en la bronca de creer que es imposible lograr eso que tanto anhelamos, y se pierde la consciencia y la capacidad de ver lo obtenido.
Cuántas veces escuchamos las frases: “como no tengo todo lo que amo, más amo todo lo que tengo”, es así, no puede ser que el mundo se haya vuelto tan egoísta e incapaz de que cada uno entienda que debe ser original sin copiar caras, ropas, fotos amistades o gente que nos rodea como adornos y no nos representan, podrían ser extras que se muestran como objetos de valor que nada tienen que ver con la amistad. Un amigo no te mira de arriba abajo para ver lo que tenés puesto y en el próximo encuentro es un clon.
Un amigo te dice lo linda que estás. Comparte. Es agradecido sin robar, sin copiar, sin ser codicioso de lo que es el otro, hay que aprender a atravesar los propios caminos, cada ser humano tiene su propia vida y es ahí donde te transformás en alguien interesante, único y así vas a lograr que lo que sos sea atractivo y bello para los demás, desde tu personalidad y ser original, quizás te ayude a ser mejor y a ser feliz con lo que sos.
fuente:teleshow.com
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